Empaca y sal a la aventura.
Aunque tu tienda viene empacada en un "Stuff sack", puede ser mejor pensar en ella como un "Roll sack". Intentar meter tu tienda en su bolsa puede ser una tarea difícil, y puede terminar con la rotura de tu bolsa y la necesidad de un reemplazo. En su lugar, sigue estos pasos para empacar y guardar tu tienda de manera eficiente.
Asegúrate de que tu tienda esté seca
Incluso después de una noche seca en el campo, tu tienda a menudo terminará con condensación en la lona debido a los cambios de temperatura al salir el sol. Haz lo posible por sacudir cualquier humedad y deja tu tienda en un área soleada para que se seque antes de guardarla.
Si las limitaciones de tiempo te obligan a guardar tu tienda mojada, asegúrate de dejarla secar completamente en casa antes de almacenarla por un período prolongado. El almacenamiento a largo plazo de una tienda mojada puede llevar a la aparición de moho y hongos irreparables (y potencialmente peligrosos) en tu tienda.
Guarda tus bastones
Recoge tus bastones y desmóntalos. Ponlos en tu bolsa de bastones y déjalos a un lado.
Extiende tu cuerpo y la lona
Encuentra un área plana y seca para extender el cuerpo de tu tienda y la lona.
Doblar
Dobla tu lona por la mitad a lo largo para que haya un borde largo y recto en el medio, y sea aproximadamente tan ancha como la longitud de tu bolsa de bastones. Repite con el cuerpo de tu tienda.
Enrollar
Este es el paso más importante. Una vez que tu lona y el cuerpo de la tienda estén doblados, colócalos uno encima del otro, agarra tus bastones y enróllalos firmemente alrededor de tus bastones en tu bolsa de bastones.
Meter
Si has enrollado tu tienda bien y apretada, deberías encontrar que cabe fácilmente en tu bolsa de almacenamiento, con un mínimo de fuerza o presión. Si ese no es el caso, desenrolla y dale otra oportunidad.